Hubo un tiempo en que las Barbies más importantes de la historia no decían exactamente «Sé lo que tú quieras ser». You can be anything, en su natal inglés. Muy al contrario, parecía que muchos de sus mantras eran «Esto es lo que debes alcanzar» o «Así es como te debes ver». Aún peor: «Sólo a esto puedes aspirar». En el episodio 14 de su quinta temporada, esta problemática es satirizada por Los Simpson cuando Lisa se ofende por el preocupante fondo de las frases que su nueva Stacy Malibú —clara parodia de Barbie— está limitada a decir. «¡Cómo me gusta ir de compras!» o la ya famosa línea «No me preguntes, soy sólo una chica».
Sin embargo, y aunque su figura siempre se ha visto envuelta en escándalos, sosteniéndose como un molde de bellezas canónicas sin discapacidades y centradas en la mirada del hombre tradicional, Barbie se ha esforzado por ir más allá. Por lo menos para apaciguar las denuncias superfluas y a las Lisa Simpson del mundo entero, pues los resultados (y las medidas tomadas) ciertamente no han sido ni suficientes ni triunfantes.
(re)Presentación
Es bien sabido que la industria del juguete desempeña un papel muy relevante. Tanto en la configuración de cómo nos vemos desde pequeños, así como en la manera que nos relacionamos con nuestros cuerpos, razas y oficios o profesiones. No es un secreto que la representación de un juguete es fundamental cuando somos niños. Entonces, ¿qué pasa cuando tenemos muñecas negras o asiáticas desde 1940 en el mercado, sí, pero se hacen con el molde de las siluetas caucásicas? Cuando caen en estereotipos fácilmente. Si la Barbie con más profesiones sigue siendo la blanca y rubia. Qué impacto saber que la línea diversa es más barata o que incluye menos accesorios adicionales. Incluso, que se producen menos al año y siguen vendiéndose como una alternativa.
La heroína sigue siendo la mujer típicamente esbelta, rubia y blanca. Algo que no empata con su supuesto mensaje inspirador, ¿cierto? Por ello, hay quienes denuncian hoy que su actitud de «Tú puedes» y «Las niñas son capaces también» es algo paternalista e incongruente. Sencillamente, porque no se está refiriendo a todas ni les está hablando como iguales.
Quién es Barbie
Desafiando al binario de ser buena o mala, Barbie es parte de la cultura pop y su papel resulta inescrutablemente decisivo en las revoluciones contemporáneas. Feminismo y derechos civiles en esa lista. Su papel: siempre clave en nuestra sociedad.
Tan es así, que su origen significó una agitación y un cambio de paradigma enormes. No sólo en el terreno de los negocios, sino también en el de lo social. Era la década de 1950 cuando Ruth Handler —quien le daría vida— vio a su hija jugar con muñecas de papel. Para ponernos en contexto, ése era un momento en que se alentaba a las niñas a desarrollar sus «instintos maternales» con muñecos de bebés. Sin embargo, esta mujer notó algo fundamental: su hija y sus amigas estaban más interesadas en recrear las escenas sociales de adolescentes y adultos. La idea de una muñeca mujer nació y ¡pum! Desde entonces ésta se ha convertido en norma. Se ha confirmado, incluso, que son efectivísimas en las infancias para representar las interacciones sociales que ven a su alrededor y desarrollar habilidades sociales.
Aquí, sus momentos más impactantes de los todos los tiempos.
Las Barbies más importantes de la historia
De modelo adolescente a mujer trans.
Number 1 Barbie Doll (1959)
La muñeca que lo empezó todo. Handler y su esposo Elliot —cofundador de Mattel Inc.— presentaron esta propuesta a Feria Internacional del Juguete de Estados Unidos, que tuvo lugar en Nueva York el 9 de marzo de 1959. Un éxito. Con un sofisticado traje de baño a rayas, la muñeca estaba disponible con cabello rubio u oscuro, muy vanguardista —y visionaria— con su cola de caballo alta y unos ojos que miraban recatadamente hacia un lado. ¿Su nombre? En honor a la hija de los Handler, Barbara.
Más tarde se sabría que su inspiración era una muñeca alemana Lilli basada en una tira cómica. Caricatura que se trataba, en realidad, de una cazafortunas muy exhibicionista y sensual.
Esta muñeca venía con una plataforma que le permitía estar de pie.
Midge Barbie embarazada de la línea Happy Family (1963)
Impactante y crucial para la era de las nuevas discusiones en familia en el siglo XX. Sin embargo, y a pesar de contar con una de las anatomías más interesantes en el mundo del juguete, grupos conservadores empujaron para que se retirara de tiendas. Alegaban que ésta promovía el embarazo adolescente e incitaba al embarazo fuera del matrimonio. ¡¿Dónde carajos estaba el marido responsable de esta calamidad?! ¡Ni siquiera usaba anillo de casada! Y el colmo: perturbaba especialmente a niños varones que no sabían de dónde vienen los bebés o cómo es que llegan a un vientre materno. Midge… armaste un lío, querida.
Barbie Astronauta (1965)
Con un cabello corto y dejando atrás sus grandes vestidos y trajes de baño, Barbie se embarcó en la aventura espacial cuatro años antes de que Neil Armstrong llegara a la luna. Un mensaje contundente y que hoy aparece en importantes enciclopedias de diseño y género —aunque con ciertos bemoles—. De las Barbies más importantes de la historia, pues mostraba a una mujer dispuesta a conquistar el mañana (y cualquier ocupación).
Christie Barbie (1968)
Aunque Francie —de 1967— podría ser la primera muñeca Barbie negra, se hizo con el mismo molde que una prototípica blanca. Por ello, Christie —quien vio la luz durante el Movimiento por los Derechos Civiles— es considerada la primera Barbie negra (con un estilo mod y pelo corto).
Barbie Esquiadora Olímpica (1975)
Una mujer medallista en los años setenta. Sí, uniformada como estadounidense y con la leyenda Best in the World sobre el empaque, pero a fin de cuentas una competidora triunfante.
Barbie Day-to-Night (1985)
Relevantísima no sólo por el cambio de ropa estilo «revelación» que traía puesto. Sino porque ponía a este personaje femenino en la narrativa de una mujer que se puede desempeñar profesionalmente y después arreglar para salir de fiesta. OK… tal vez un saco cruzado y un portafolios es algo sexista, pero en su momento fue un parteaguas. Con esta muñeca —también conocida como la Barbie CEO— se consolidó la campaña We Girls Can Do Anything.
Barbie Piloto Air Force (1991)
Una mujer en la milicia en pleno contexto de la Guerra del Golfo. Impactante.
Barbie Sirena (1991)
¿Su mayor aportación, la cual le hizo pasar a la historia? Podía entrar a la bañera contigo, unía mundos de fantasía con la historia real que le había acompañado hasta la fecha y su cola de pescado era removible.
Totally Hair Barbie (1992)
La Barbie de las millennials, por excelencia. Con cabello que le llegaba a los dedos de los pies, esta muñeca venía con un tubo de gel para peinar y se convirtió en un éxito instantáneo. De hecho, es la versión más vendida en la historia de Mattel con unos 20 millones de réplicas agotadas.
Barbie Fashionista en silla de ruedas (2019)
La primera muñeca con discapacidad en esta familia. De acuerdo con Mattel, la silla de ruedas fue uno de los artículos más solicitados por los fanáticos y durante el proceso de diseño la compañía trabajó en estrecha colaboración con expertos de la UCLA Mattel Children’s Hospital para garantizar la precisión. De las Barbies más importantes de la historia, indudablemente.
Barbie Trans (2022)
La muñeca en honor a Laverne Cox es la primera basada en una mujer transgénero.
