La historia de la Formula 1

7 momentos históricos en la F1 que definieron la cultura del motor para siempre

Un recuento por los episodios más relevantes en el desarrollo de la Formula 1 para entender sus alcances y poderío hoy.

Lo que alguna vez fue considerado un deporte de nicho –completamente insular del mainstream—, tiene hoy su propia película: Fórmula 1. Y vaya que estamos viviendo su era más visible, mercadológica y aurática de todas. Pero no nos confundamos, por favor. No vayamos a pensar que nunca antes esta práctica de motor había gozado de una afición apasionada y devota. De un cosmos bien conformado, con personajes y acciones interesantísimos. En realidad, estamos hablando de un deporte que ha albergado muchísimas rivalidades, escándalos y vínculos con el cine, el lujo y hasta el jet set desde hace mucho, mucho tiempo. Pero hoy la cosa es distinta. Aquí hubo un cambio de juego durante los últimos años, donde la atención mediática, nuevas prácticas en línea, revolucionados sentidos de pertenencia, hiperconexiones y una fuerte urgencia por historias sentaron el caldo de cultivo para la euforia contemporánea por el automovilismo.

Para muestra, tenemos Drive to Survive —el documental de Netflix—. Que es causa y consecuencia en sí mismo de este fenómeno. La serie fue una respuesta para esas historias tras las carreras que el público empezaba a demandar. Al mismo tiempo que un catalizador para esa afición que ha crecido y se ha vuelto más diversa en cuanto a identidades de género, ubicación y participaciones.

Todavía más importante que dicha producción para las pantallas en nuestras salas, lo que se comenzó a generar para los dispositivos personales. Con el auge de TikTok, donde la gente no solo habla de F1, sino que crea contenido y comunidades virtuales a su alrededor, nuevos fanáticos ávidos de aprender descubrieron su espacio, mientras que los seguidores ya existentes expandieron sus oportunidades para interactuar y hablar sobre el deporte.

En este complejo entramado tenemos también la resemantización de la Fórmula 1 tras el confinamiento de 2020, en soportes y comunidades de videojuegos, Twitch y streaming. Lo cual estimuló la cercanía y accesibilidad del deporte a más y más gente.

El éxito de la Fórmula 1, hoy

F1 La Película con Brad Pitt y Damson Idris vistiendo Tommy Hilfiger APX GP
El poder de la ficción.

Considerando todos los cimientos que acabamos de mencionar, la película homónima al deporte que se ha lanzado este 2025 es un gran, gran anuncio de dos horas con treinta y cinco minutos. Un explainer que nos deja muy en claro que los deportes de motor son más que vueltas a un circuito. En efecto. Pero también es un retrato profundamente auténtico del mundo contemporáneo y la cultura que se ha creado alrededor del racing.

Es más. Podemos decir que este filme desdibuja las fronteras entre el deporte, el entretenimiento y la narrativa humana. Captura la resonancia cultural que la F1 ha ido proyectando con el tiempo; desde el estilo de los pilotos y la filosofía de las escuderías, hasta las marcas comerciales que les acompañan y sus terrenos compartidos con la tecnología y la ciencia.

F1 La Película
Los héroes del momento.

Por ejemplo, todos los patrocinadores —reales— que aparecen en la película no son simplemente una colocación de producto cualquiera. Son la materialización y perspectiva de un amplio ecosistema que se ha convertido en ideal de estilo de vida. MSC Cruises, Expensify, SharkNinja y sobre todo Tommy Hilfiger supieron advertir esta oportunidad.

Hoy más que nunca, las escenificaciones de la Fórmula 1 no son exclusivas para los fanáticos del motor. Están allí para cualquier observador de la cultura, entusiastas de la moda y el lujo, y nativos digitales. Personas que incluso nunca hayan asistido a un Gran Premio, pero son proclives a conectar instantáneamente con el espectáculo y la historia.

Momentos históricos en la Fórmula 1 que definieron la cultura del motor

Ahora, no todo es F1: La Película. Por supuesto, ésta se trata de la celebración al automovilismo más grande que tenemos a la fecha, en tanto que resulta también la plataforma perfecta para el storytelling del deporte y todos sus potenciales modernos. Sin embargo, hay una serie más de episodios emblemáticos en toda su historia que no debes perder de vista cuando se habla de motor culture. Y sí. Los hemos resumido para ti.

La primera carrera de Fórmula 1 (1950)

Primera Carrera de la Formula 1 en 1950
El inicio de todo.

Celebrada en un aeródromo abandonado de la II Guerra Mundial en Silverstone, Inglaterra, la carrera contó con la asistencia de unos 140 mil aficionados. Entre ellos el rey Jorge VI, la reina Isabel II y la princesa Margarita, quienes atestiguaron la victoria de Giuseppe Farina —exoficial de caballería, al volante de un Alfa Romeo—.

Jack Brabham empuja su coche hasta la meta (1959)

Jack Brabham empujando su auto a la línea de meta en Formula 1
Una de las escenas más emotivas del deporte.

Los espectadores amamos el drama y una buena historia de entrega. El campeonato mundial de F1 de 1959 se decidió cuando el Cooper T51 de Jack Brabham se quedó sin combustible en la última vuelta. Con suficiente ventaja respecto a los autos que le seguían, el piloto salió y empujó su monoplaza cuesta arriba hasta cruzar la línea de meta. Su cuarto puesto le otorgó el primero de sus tres títulos mundiales.

Los primeros patrocinios publicitarios (1968)

Auto de Team Gunston en la Formula 1
Los colores emblemáticos de Gunston.

Algo que viene muy a cuenta con todo lo que hemos discutido hasta ahora. Y es que antes las cosas eran muy distintas y los patrocinadores no dictaban la apariencia de una escudería. Sin embargo, Team Gunston, un equipo privado fundado por el piloto de carreras John Love, cambió esto siendo el primero en incorporar marcas de patrocinio en sus autos. Particularmente, eran tonos naranja, marrón y dorado, que representaban los cigarrillos Gunston, los que marcaban su identidad. Después de esa carrera, muchos equipos siguieron el paso.

La relojería de TAG Heuer se hace fundamental (1985)

Enzo Ferrari
Enzo Ferrari.

Justamente a la mitad de la década de los ochenta, el propietario de McLaren, Techniques d’Avant Garde Group, adquirió Heuer —que se convirtió así en TAG Heuer—. Su nuevo logotipo se añadió al MP4/2C, el impresionante McLaren rojo y blanco que llevó a Alain Prost a la victoria en 1986, y la unión del lujo y el motor pivotó su presencia en este deporte. La llegada de Senna un par de años después a la escudería catapultó también la imagen de estos relojes y ayudó a que se transformaran en el Cronometrador Oficial de la Fórmula 1 para 1993.

Algo con total coherencia si recordamos especialmente que años atrás Heuer desarrolló originalmente su Centigraph HL205 para «il Commendatore» —es decir, Enzo Ferrari—, ya que él «estaba absolutamente seguro de que los franceses hacían trampa» al cronometrar la carrera de Le Mans en su propio terreno. Dicho cronometrador electrónico de alta tecnología fue muy útil para Ferrari en Le Mans y en la Fórmula 1, posicionando su firma como un referente de precisión y excelencia dispuesto al automovilismo.

El debut de Michael Schumacher (1991)

Michael Schumacher
Schumacher y su icónica sonrisa.

Si este nombre no te suena, ¿eres realmente un fan de la F1? No podríamos asegurarlo. El piloto alemán Michael Schumacher debutó en la Fórmula 1 en el Gran Premio de Bélgica con el equipo Jordan. Tras clasificar séptimo, se vio obligado a retirarse en la primera vuelta debido a una rotura de embrague. Sin embargo, el equipo Benetton lo fichó rápidamente como piloto titular, y ganó el título en 1994 y 1995. Ya en Ferrari, Schumacher elevó su estatus a ídolo conquistando cinco títulos seguidos, de 2000 a 2004. Esta leyenda obtuvo 7 campeonatos, 91 victorias, 155 podios y 1566 puntos.

La muerte de Ayrton Senna (1994)

Ayrton Senna sin playera en la Formula 1
Un hombre convertido en mito.

Un sex symbol internacional y un ícono de talento, carisma, fiereza y hasta esperanza en la sociedad brasileña —especialmente, durante fuerte períodos de dificultades económicas y políticas en su país natal—. La trágica muerte de Senna en 1994 en el Gran Premio de San Marino propició importantes mejoras en la seguridad de la Fórmula 1, incluidos cambios en el diseño de los circuitos y la prohibición de ciertas ayudas a la conducción.

Lewis Hamilton gana el GP de Gran Bretaña (2008)

Lewis Hamilton en el GP de Gran Bretaña Formula 1 2008
La leyenda contemporánea.

El hoy ídolo de la F1 estuvo a punto de ganar el título en su temporada de novato, pero en realidad no fue hasta esta aparición frente a su público local que demostró su talento y magnetismo en un deporte que ya coqueteaba con la nueva era. Moda, música, espectáculos… todo convergió con este personaje para consolidar las pilotos polisémicos que tenemos ahora, devenidos en deidades de estilo y consumo masivo.

La carrera apenas comienza al parecer y la línea de meta es cada vez más compleja.

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