No querer celebrar nada (o hacerlo a tu manera) es completamente válido. Romper con las expectativas irreales de esta época es el punto de partida para dejar de padecerla.
No: pretender ‘vibrar alto’ todo el tiempo y buscar el lado positivo siempre no está bien. La positividad tóxica nos impide validar nuestras emociones y aceptar que lo malo también es parte de la vida.
Cañada de la Virgen, en la periferia de San Miguel de Allende, es un rancho comprometido con la crianza respetuosa del ganado y que ofrece un retiro lleno de tranquilidad.